La futurología me da bastante yuyu, entre otras cosas, porque es una de las múltiples ocupaciones de mis primos. A partir de algunos artículos e informaciones fragmentarias de los media y, sobre todo, de lo que dicen otros futurólogos, hacen predicciones que o bien son très épatant (y con suerte nadie los recuerda, gracias a la caducidad buscada de dichas intervenciones) o bien son como las de la pitonisa de Delfos, tan generalistas que siempre van a acertar a menos que no haya futuro: "Triunfaras... no... caerás... en... batalla".
Lo que me produce un acongoje superable es partir de algunas de las tendencias actuales y pensar a corto plazo en sus desarrollos. De ahí el plural en el título.
Podemos comenzar con el concepto de killer application. Estaríamos hablando de aquellas aplicaciones que ponen amplios sectores cabeza abajo. Como indican en el artículo, "aplicaciones tan útiles que serán suficientes por sí solas para que los usuarios adquieran un dispositivo o sistema operativo específico, aunque sólo sea para hacerlas funcionar". Una killer application puede mantener en pie una plataforma minoritaria, como ha ocurrido en España con Apple y la autoedición.
Extendiendo un poco el concepto, una killer application dispara la adopción de un dispositivo y/o tecnología, tal y como ocurrió con los PC, la ofimática, los clientes de correo y los navegadores. Dando la vuelta a la cuestión, podríamos llegar al concepto de killer device, un dispositivo TIC que produzca cambios fundamentales en grandes sectores de la economía y la sociedad.
El PC es un killer device, y también lo es el teléfono móvil. No lo son ni las PDAs ni los Tablet PC.
Un killer device necesitó en su momento de una killer application. Al primero le pueden aparecer más killer applications después de consolidarse, y lo que cambiaría entonces sería la percepción y valor del dispositivo. Un buen ejemplo ha sido la generalización del acceso a Internet: el PC, de ser un dispositivo ofimático ha pasado a ser, también, una puerta de acceso a internet y el email.
En Zonalatina incluyen un buen artículo sobre los roles de la adopción de una innovación tecnológica. Por este orden, serían: innovador, adoptador temprano (early adopter), mayoría temprana, mayoría tardía, furgón de cola. Lo malo es que este modelo funciona si el producto alcanza a un rango de usuarios suficiente.
La PDA se quedó a medio camino entre los early adopters y una mayoría temprana porque careció de nada parecido a una killer application. No lo consiguió con su software central (gestión de información personal, calendario, agenda, tareas), ni con sucesivos intentos, tales como la gestión personal de finanzas. Ni la tecnología de la pantalla ni su tamaño eran adecuados para su popularización como dispositivo de lectura. Los usuarios de PDA adquirimos nuestros cacharritos antes por las características de la plataforma en sí, por la idea, que por un uso claro y específico.
De momento le está ocurriendo algo parecido a los Tablet PC, y encima a menor escala. Si habéis estado recientemente en reuniones de cierto nivel, habréis visto como cuando era oportuno salían a relucir preciosos juguetes, digo portátiles, como los Qosmio o sus primos pequeñitos, los VAIO tx. En mis reuniones, el único Tablet presente era mi fiel Toshiba Portégé M200, y eso que es más barato que los dos ejemplos anteriores y permite más posibilidades.
En su momento, lo que me enamoró de Tablet PC fue un concepto y no un uso específico y rupturista. Me cautivó el concepto de pen computing más allá de los límites de las PDA, la posibilidad de usar un formato vertical u horizontal de pantalla y manipularla con mis manos, la multiplicación por dos de mis posibilidades de interacción con la máquina (teclado y ratón + lápiz y voz). Quería el concepto, no un uso específico, y me sabía a medio camino entre innovador y early adopter en el contexto español. Sólo la firme apuesta de Microsoft me hace confiar en que no he apostado, a mi vez, por un caballo sin fuelle, que se va a quedar a mitad de camino.
Como yo, otros early adopters se preguntan por la killer application que va a lanzar a la popularidad a sus cacharros queridos. En el caso de Tablet, una killer application sería tanto un tipo de soft preexistente dramáticamente mejorado por medio de la tinta electrónica (mindmanager, por ejemplo, está en buen camino), como un tipo de producto completamente nuevo (Onenote sería el mejor ejemplo de esto, y es posible que las mejoras que van a introducir en Office 12 para él terminen de catapultarlo).
JKontheRun tampoco encuentra una respuesta definitiva a esto. Y puestos a ser futurólogo me apunto a su carro, a una apuesta que tiene desde hace años y con la que coincido desde que conocí la existencia de OQO en 2002. Así
Maybe the killer Tablet PC app is not a program at all. Perhaps we should be discussing what the killer "feature" for Tablet PCs might be.En otras palabras, quizás el salto a las manos de una "mayoría temprana" esté, precisamente, en un formato mini, en los modelos de handtop que intel prepara para el año que viene. Una máquina poco más pesada que una PDA y que arranca igual de rápido, pero con una superficie real de pantalla más decente y toda la potencia de un PC. Una máquina que pueda sostener con comodidad con una mano pero que no se me quede corta.
Hay algunos que pretenden enterrar a Tablet PC. Si algunos usuarios de Tablet no estamos equivocados, los rumores de su muerte fueron precipitados.
Hola, poliorcetes.
ResponderEliminarDices que "Los usuarios de PDA adquirimos nuestros cacharritos antes por las características de la plataforma en sí, por la idea, que por un uso claro y específico." ¿Estás seguro de esto?
Quizá las pda compiten ahora con los móviles, a los que van incorporando poco a poco aplicaciones diseñadas para dispositivos de mayor tamaño como son las pda. Pero tengo la sensación de que las pda pueden aún defender su espacio en el mercado con los desarrollos de software que se están haciendo para ellas, al margen de las utilidades centrales que mencionas en tu post. Poder ir con tu ppc a una conferencia, enchufarla a un proyector con un cable VGA e iniciar tu presentación es algo fantástico; sobre todo por el hecho de no tener que llevar cartera, mochila o bolso: la pda cabe en un bolsillo.
Pienso que el "uso claro y específico" que podemos llegar a dar a nuestra pda es tan "claro y específico" como el que llegaremos a dar a nuestro portátil, a nuestro tablet pc (el que lo tenga) o a nuestro pc. Ahí está el dispositivo, ahí están los desarrolladores de software y ahí estamos los usuarios.
El ejemplo que me pones es bueno para ilustrar mi punto: no digo que las PDAs vayan a desaparecer (eso lo dicen otros), sino que ya es imposible que se conviertan en killer devices. Usar la PDA para hacer presentaciones no es una killer app. de ningún modo.
ResponderEliminarY por otra parte las limitaciones de uso que tiene la PDA tanto por el OS como por el tamaño real de la pantalla son decisivas para que tu último párrafo no sea válido