Leo en Lector-e una referencia a una noticia de ABC que da cuenta de una iniciativa de introducción de ereaders en el centro de parapléjicos de Toledo. Efectivamente, la Fundación del Hospital Nacional de Parapléjicos y Grammata han puesto en marcha un programa de accesibilidad por el cual los usuarios pueden sortear las barreras de accesibilidad de un ereader usando un atril y un puntero para boca.
Da la casualidad de que hace una semana lanzamos desde eMadrid DiscaDIY, una iniciativa para reunir soluciones DIY a problemas de accesibilidad de personas con discapacidad. Dos de esas soluciones tratan precisamente de accesibilidad a ereaders:
1. Soporte: tras las experiencias de este verano, dime cuenta de que ciertas fundas baratas y waterproof de ereaders se sostenían por sí mismas contra el pecho. En la solución DiscaDIY se ha documentado y aclarado en lo posible esta propuesta.
2. Solución para uso de ereaders sin pulsar ningún botón. Esta sólo es válida de momento para kindle, pero con el tiempo esperemos que hacks sencillos como éste se puedan generar en más ereaders, porque poder leer sin pulsar un botón es una necesidad esencial para los usuarios de ereaders con discapacidad.
El Kindle 3 ya tiene la opción de "leer los menús" como medida de accesibilidad para gente con vista muy fastidiada, y también viene con 2 tamaños de fuente extralargos.
ResponderEliminarAdemás trae micrófono, aunque todavía está desactivado. ¿Para qué puede servir? ¿Como dictáfono? Lees y te graba la voz en un mp3. Podría ser. Yo apostaría más a controlar el Kindle con órdenes de voz. Eso sí, al igual que el texto-a-voz, sólo en inglés. A ver qué nos trae Amazon en futuras actualizaciones.
Tu solución casera está muy curiosa, sí señor. Los que tenemos el accesorio barriga de serie tenemos la suerte de no necesitar un apoyo extra. ;) Como el t2s no va muy rápido, supongo que a mucha gente le daría tiempo a leer una página antes de que salte a la siguiente. El problema viene con las páginas que, por lo que sea, no te da tiempo a acabar.
Siempre me ha gustado leer tumbado en la cama, boca abajo y con los codos apoyados como si estuviera en la playa,y os parecerá coña pero me gustaría en esos momentos tener un pequeño y sencillo mando a distancia que me permitiera al menos avanzar página con un cómodo click y así no tener que "sacar" la mano de mi posición de apoyo cada dos por tres. ya digo, es como de vago pero la lectura sería más plancentera. La solución del kindle que aporta el compañero podría estar bien, pero sería un poco agobiante la posibilidad de que o nosotros o la máquina se adelante en la lectura.
ResponderEliminarDe momento es lo que hay. En cuanto sepa de otras y/o mejores soluciones y haya los permisos adecuados, invitaré a que se publiquen en DiscaDIY. Si para nosotros, personas sin discapacidad, "leer sin manos" puede ser una curiosidad o hasta una postura cómoda, para una persona con discapacidad es lo que hay: eso, o nada. Si, por ejemplo, te cuesta horrores pasar una página, o directamente no la puedes pasar tú solo, la diferencia es completamente esencial.
ResponderEliminarDesde hace tiempo, un grupo de gente luchamos por una utilización menos discriminadora del lenguaje y así, todos somos diversos no discapacitados. Una persona que para moverse precisa una silla de ruedas es una persona con DIVERSIDAD FUNCIONAL MOTORA y así sucesivamente, persona con DIVERSIDAD FUNCIONAL VISUAL, AUTIDTIVA, COGNITIVA, MENTAL, ETC... Ver: http://es.wikipedia.org/wiki/Diversidad_funcional
ResponderEliminarHola, Jesús
ResponderEliminarComo habrás visto en el post, la experiencia con personas con discapacidad que hemos acumulado (poca, es cierto) nos ha llevado a la idea que presento. De hecho, estamos reuniendo más ideas comparables en una iniciativa que nos ilusiona, www.discadiy.org . Te invito a que la visites y a que la critiques en todo lo que creas que es mejorable.
Por lo demás, y partiendo del respeto más completo a tu posición (parecida a la del Foro de Vida Independiente), la nuestra es ante todo práctica. Como verás, el título de DiscaDIY es "Do It Yourself para diversidad funcional". Empleamos indistintamente diversidad funcional y discapacidad, porque el espíritu del proyecto deja a las claras que no albergamos el más mínimo ánimo discriminatorio.
Con todo respeto, insisto, creo que la integración de todas las personas excluidas pasa por la actitud y el acercamiento antes que por el uso del lenguaje.