En aquel post, Paul Viejo y yo comentábamos lo siguiente:
Paul Viejo dijo...
Yo también tiro de mobipocket para casi todo, Juan Luis, pero las pruebas que he hecho hasta ahora con Calibre (por aquello de su inmediatez) han sido, para que te hagas una idea, como usar el mobipocket-creator para pasar a .prc un documento en pdf... :S Deficiente. Pero si quitasen esa opción (la del mobi en cybook, digo, y espero que no) sería casi la única opción digna para hacer un volcado masivo de nuestros mobipockets, ¿no?
Abrazos,
P.Juan Luis Chulilla dijo...
Paul, sería la opción legal para pasar los mobi/prc... sin DRM.
Cuanto más lo pienso, más dudo de que quiten el soporte de mobi, por la siguiente razón: un % de sus usuarios han comprado diccionarios, que es uno de los puntos fuertes de mobipocket, o novelas. De pronto, no pueden seguir leyéndolas o usándolas.
Sería un golpe de imagen demasiado grave, me parece
Por una parte, no dejan tirados a los fieles clientes que quieran seguir usando mobipocket, por gusto, por costumbre o porque hayan comprado ebooks en ese formato. Se les proporcionan las mejoras... pero me da que es la última vez.
Y creo que es la última vez porque Amazon se ha encargado de que ePub triunfase. En otras palabras, en nuestra época un estándar neutral tiene más opciones de triunfo que un formato propietario, porque va a ser la opción natural para los nuevos jugadores y, en cuanto se conozca, el público tenderá a preferir un dispositivo con un formato que le sirva en otras máquinas. Nada nuevo, la historia del malo VHS y el bueno beta.
Pero si encima Amazon se encarga de eliminar las posibilidades de convivencia de formatos, prohibiendo por contrato que mobipocket pueda convivir con ePub, la situación queda diametralmente clara: el público tendrá que elegir entre un triunfante (y peligroso) kindle, que te borra un libro que has comprado sin consultarte y que se situa como terrorífico embudo, con ley y todo, entre el público y los editores y autores, o la creciente constelación de propuestas compatibles con ePub, empezando por Sony y siguiendo por los demás fabricantes.
Si las cosas salen como deberían, cualquier lector de ebooks podrá usarse para leer ebooks en ePub, tanto protegidos como no. Será la enésima repetición del triunfo de un estándar, y hasta veo más probable que se repita una situación como la de los videos VHS: un número de fabricantes compitiendo y conviviendo, precios más ajustados, algunos fabricantes principales y otros secundarios, de nicho, etc.
No es seguro, claro. Lo mismo Sony se lleva el gato al agua y se alza como jugador principal. Pero lo dudo, porque en este caso, editores y autores tienen mucho que decir y Amazon tiene que haberles metido el miedo en el cuerpo. Y ojo, no les deseo ningún mal a Amazon, pero su modelo de negocio se ha demostrado como perjudicial para todos, para autores, editores y público.
Volviendo a bookeen, ha sido todo un alivio que decidieran no dejar tirados a los clientes que llevamos tiempo usando mobipocket. Bien pensado, es una medida de supervivencia por su parte: si lo hubieran hecho, habrían acelerado el abandono hacia opciones más modernas; si no hubieran introducido la opción de ePub, se convertirían en una reliquia del pasado, incompatible en muy poco tiempo con la creciente oferta de ePub por parte de las editoriales.
Y esto me deja ante una duda: durante años he usado el cliente PC de mobipocket con total satisfacción. Miento, satisfacción casi total, porque me frustraba que las estupendas opciones de subrayado y anotación que incorporaba tanto ese cliente como el cliente de windows mobile no estuvieran implementadas ni en el Iliad (por absurda decisión) ni en el cybook gen3. No tengo experiencia con Calibre ni con ningún otro producto de conversión a/de ePub.
Paul, comentabas hace 3 meses que a Calibre le falta un hervor. ¿Piensas igual ahora? Y a los demás lectores, ¿Habéis trabajado con programas cliente de ePub? ¿Qué tal os va?
Desideratum final: es necesario que alguien saque un lector de ePub para android con anotación y subrayado.
Después de trastear estos tres meses (y unas cuantas horas más estos días, debo reconocerlo, tras el estrés ridículo que se me vino con lo de la migración a epub), y de buscar otras opciones, he de reconocer que Calibre es la mejor. Y además ellos lo saben. Notan como notamos todos el gran avance del estándar y pisan el acelerador: 11 actualizaciones en los dos meses de verano que llevamos. No está mal. (Además, Calibre es multiplataforma y no sólo convierte a epub), y los no-windows no tienen que buscarse la vida tranmpeando ni con betas infinitas).
ResponderEliminarA día de hoy, no podría decir que los resultados con Mobip/Creator sea mejor que los de Calibre a la hora de convertir cosas a .prc; y la calidad de las conversiones a epub está a la par. Es decir, muchas cagadas si los archivos de origen no van "preparaditos". Pero eso también pasaba (pasa, perdón, se ve que ya me estoy "conviertiendo") con Mobipocket. Por mi trabajo yo recibo a diario novedades de las editoriales, que me envían los libros en los formatos más diversos (la mayoría en pdf, claro, algunos con las marcas de imprenta incluídas), y al pasarlo al Cybook, o me dedico a "toquetearlos" yo antes, o los leo así como caigan, que es lo que el conversor de mobipoket hace. Pues un poco lo mismo, por ahora, con Calibre.
De hecho, se creo que se ha notado la aparición de un programa para edición de epubs, que, por lo que voy leyendo se está usando mucho más que para la creación "dura" de epubs (bendito el que saque algo que funcione a la primera) para los retoques después de convertir cualquier archivo a este formato. Se llama Sigil, está aún en una fase temprana, pero promete. Merece la pena echarle un vistazo.
Pero, sobre todo, estoy de acuerdo en que el que estemos hablando de esto, de una supuesta problemática por tener que "pasarnos" a epub (no lo has dicho, dime, ¿pasarás, actualizarás el cybook?), es culpa de Amazon y su política. Y que ese famosos contrato que impide los dos drm no cederá, seguro, pero por qué no permitir mobi-drm y epub-nondrm es algo que no entiendo.
Uf. Perdona la parrafada. Pero es que me gusta tanto este sitio...
Un abrazo,
P.
PD: Yo lo que quiero de verdad es que cuando las editoriales españolas, esa alianza tripartira random-planeta-santilla y los de la gente de 36L (el otro tripartito Vicens Vives + Abacus + Spanair) se lancen a la publicación seria de ebooks (primavera 2010??), yo lo que quiero, decía, es que las novedades me las manden los de prensa ya en formato epub, que estoy harto de convertir y formatear. Conste aquí me queja. Por si sirve :P
Paul, ante todo he de decirte que siempre me parece mal que alguien que se trabaje una aportación la acabe pidiendo perdón por su extensión. Si cuesta leerlo, costará n veces más escribirlo. Máxime en tu caso, que nos has puesto ante un cuadro del que hasta ahora estaba alejado.
ResponderEliminarMe estás contagiando las ganas de meterme con calibre, y eso que mobipocket me ha fidelizado como pocos productos de software (menos que LyX, para terror de mi socia en lo que se refiere a las facturas y documentación de la empresa... semper fidelis o que Lyx hace hervir mi parte aragonesa, quien sabe). A lo que voy, si no tenía ganas de cambiar de mobipocket es por lo currado que está el producto y por el poco trabajo que pide para mantener una biblioteca digital. Pero para su desgracia lo compró Amazon y, con ello, mató el futuro del cliente local a medio plazo.
De Sigil he de decir que tiene buena pinta pero a) va bajo GPL 3.0, excesivamente puritana para mi gusto y b) más importante, creo que el objetivo desde el principio está errado. Salvando las distancias, es como escribir con Scribus. Si ePub es el formato final, lo suyo es parir el texto con el editor que sea más cómodo para el autor (en mi caso va variando, hace 2 años que me enfadé con notepad++ por su absurda forma de implementar las regexp y ahora uso VIM cuando se trata de texto plano), dejando la conversión a ePub al texto cerrado, que no hay que editar. Pero vamos, lo digo desde el principio, que luego el trabajo real con el producto puede acabar invalidando mi comparación
Estoy pensando en pasarme a ePub... sin prisas. Me da una pereza terrible reformatear mi biblioteca. El futuro va por ahi, pero ya sufro de nostalgia de antemano.
Pones muy pronto el lanzamiento serio de ebooks por parte de las grandes. Yo creo que quedan escollos por resolver, desde plataformas, a formatos (aunque la opción ganadora parece ser ePub con Adobe Digital Editions), modelos de negocio, implantación en mercado de lectores de ebooks, precio de dichos lectores... Diría 2011 o a lo más pronto navidades de 2010.
A ver si te hacen caso y te mandan los textos en ePub. Sería lo suyo, claro, pero me temo que PDF, en según qué ambientes, ha adquirido una poderosa costumbre de uso.
Y por cierto, ¿Alguien más está en la misma situación? ¿Alguien se plantea pasarse a ePub, quedarse en mobipocket?
Desde luego, el avance de ePub parece imparable: Google Books ya ofrece las descargas de libros del dominio público en ese formato. Otra incorporación reciente es el Projecto Guttenberg.
ResponderEliminarSigil es necesario. Una de las grandes ventajas del elibro es que se puede editar. Si las erratas y los errores de traducción nos molestan, o queremos añadir nuestras propias notas, es mucho mejor usar un programa como Sigil que pasar de ePub a doc para editar y después volver a ePub.
A largo plazo habrá un programa así incluido en todo lector, para no tener que pasar por el PC, pero un programa libre para PC es un prerrequisito. Cuando esté completo, ya tomarán el código y lo adaptarán para los lectores.
Y, por supuesto, llegará el día en que tales modificaciones que hayas hecho en un elibro con el nieto de Sigil se puedan exportar a un wiki o cualquier otro sistema de control de versiones, de tal manera que todo el mundo se pueda beneficiar de las erratas que yo corrija.
nunca había pensado en corregir erratas de un libro. Todo lo más, si superan cierto límite me cabreo y ya está.
ResponderEliminarEn cuanto a las notas, no veo necesario editar el cuerpo del texto. Estarían mal implementadas si se definieran dentro de los tags de texto. Lo suyo sería algo como el manifesto de PDF, metadatos localizados por el medio que sea.
No sé, sigo sin verlo... de momento. Prefiero VIM o LyX según lo que necesite (texto plano o texto formateado) y convertir cuando haga falta. Vuelta a la analogía con el impresor: el escritor no se sentiría cómodo con las herramientas del impresor sino con las suyas propias