DRM y Stallman

Joel, el otro día, comentó un texto de Stallman, The right to read.

En él, Stallman mete el DRM de los ebooks dentro de su visión del DRM en general. Hay que precisar que lo que desde una perspectiva española se podría leer como un disparate imposible, desde una perspectiva USA se leería como algo exagerado... pero no imposible si ciertos caminos se profundizan. Ahora mismo, la diferencia de experiencia y sacrificio económico que supone la vida universitaria para un estudiante en USA y en España provocan que, de hecho, no sea fácil de entender el punto de partida del cuentito de Stallman.

Stallman no tarda en llevar el ascua a su sardina: lo peor del DRM en productos informáticos es que el usuario deja de controlar el comportamiento de su máquina. Ya hay casos previos, como el rootkit de sony en el que una empresa se excede con mucho en lo razonable para proteger los contenidos que gestiona.

Cada vez es más crítica la compaginación de la protección de los derechos de los ciudadanos, por un lado, y de los autores y gestores de contenido, por otro. No me parece que ni uno ni otro sean sacrificables, y el DRM opaco y draconiano o la falta absoluta de DRM significan sacrificios para alguien involucrado.

No sé si el DRM social podría llegar a funcionar, pero se me ocurre otra alternativa: un tercero fiel, alguna agencia pública, que recibiera todos los esquemas de protección DRM que se emplearan, con objeto de asegurar dos cosas:

que en el futuro, la persona que adquiriera un ebook con DRM pudiera seguir leyéndolo indefinidamente, con independencia de la existencia continuada de la empresa que implantase el sistema DRM concreto

que el sistema DRM hiciera lo que en teoría hace y nada más

Hoy en día creo que el DRM fuerte es la opción con más visos de triunfar. Eso no implica, claro, que crea que es la mejor opción