Concretamente, lo dice James Kendrick, un bloguero veterano al que llevo siguiendo 8 años o incluso más. JK fue uno de los pioneros en tablet PC, e hilaba muy fino hasta que, o tempora o mores!, sucumbió al switching a Apple y el criterio se le quedó un poco perjudicao. Las varas de medir es lo que tienen: que de usarlas y liarte a garrotazos se te complica la contemplación de lo que escapa a la medida. En tecnologías digitales, además, te hacen mucho más vulnerable a la moda del momento.
Que en este caso, como todos sabéis, son los tabletos. ¿Por qué no se presentan ereaders puros o híbridos en el CES? Por los tabletos, según JK. Al menos no se denigra a sí mismo mendigando por la atención como hacen los tolomatos cuando tratan de ejecutar vilmente al ereader, pero roza el peligro al caer en la simplificación de una orgía electrónica tan poblada como es el CES en la dualidad ultrabook / tableto. Y no digo que no se vaya a dar la brasa sobre ellos, que se da por supuesto. Y hasta le doy parte de la razón a JK, al coincidir en que Amazon (no B&N, que no existen fuera de USA, caramba) y Sony se han zampado buena parte del mercado de los ereaders.
No me he tenido que esforzar mucho para encontrar que James había metido el gambón y se había olvidado de empresas como bookeen, preseente en el CES, y con muchas ganas de demostrar que su nuevo Orizon (sic) tiene algunas ventajas sobre los nuevos kindle y reader de sony. Buscando ebook me salen 39 empresas, y buscando ereader me salen 5.
Tiene razón James al constatar la muerte de bastantes aventureros de años anteriores, cuando el ereader era joven, casi todo estaba por definir y probar y no había modas que competían con ventaja. También es cierto que la tecnología base lleva más de un año sin cambiar, y que no acaban de llegar los controladores que aportarían más velocidad y fluidez a base de CPU. Y es cierto que casi nadie quiere arriesgar un buen capazo de dólares contra competidores tan asentados como Amazon y Sony, con el primero haciendo dumping como un campeón.
Pero ereaders, haberlos, haylos. Y darlos por muerto es sucumbir al varazo de la moda.